Silvie Brière
Nació en París en el seno de una familia de maestros vidrieros que se remonta a cuatro generaciones. Entre otras cosas, crearon la cúpula de los grandes almacenes Printemps y las vidrieras diseñadas por Jean-Cocteau. En 1982 ingresó en la Escuela Nacional Superior de Bellas Artes de París en la sección de pintura antes de dedicarse, durante un tiempo, a la pintura decorativa. En 1997 instaló su estudio de artista en el Domaine des Fabriques de Jouques (Bouches-du-Rhône), donde desarrolló una práctica muy diversa: dibujo, pintura, escultura, collage, instalación, etc.
De 2005 a 2010, se trasladó a un segundo estudio en Zúrich, donde se concentró en los pequeños formatos: dibujo, collage y tinta. Allí realizó una serie de dibujos collage titulada L'Origine du monde, basada en la obra de Gustave Courbet.
En 2012, dirigió un taller de pintura en el hospital psiquiátrico La Mausole de Saint Rémy-de-Provence, donde Van Gogh había estado hospitalizado. Su objetivo era utilizar el medio de la pintura para aliviar parte del gran sufrimiento psicológico que estaba experimentando. Esto la llevó a plantearse un enfoque artístico de la locura.
En términos más generales, la obra de Silvie Brière gira en torno al cuerpo femenino, infligiéndole todo tipo de metamorfosis, una muda que revela a su vez sus orígenes, sus huellas y sus cicatrices.
Expuesto en Private Choice 2021:
5 dibujos acrílicos sobre papel. Dos de la serie titulada Madre e hijo ; otros tres de la serie Niño, en la que la artista retoma un tema tradicional de la historia del arte, la Virgen con el Niño. La obra sorprende por su economía de medios, la sencillez de las líneas y la intimidad de la relación maternal con su hijo.