Olivier Lépront

Fascinado por la forma en que los grandes maestros ilustran la realización de las teorías de la óptica y la refracciónOlivier Lépront se inspira en los cuadros de Pieter Claesz y Jean Siméon Chardin, donde el realismo se lleva al extremo y los efectos de trampantojo se realzan con una iluminación lírica.

El juego de luces y sombras y y el brillo de los materiales están en el centro de las reflexiones del pintor: plumíferos metálicos, mantas de supervivencia de aluminio, bolsas de plástico holográficas y conchas nacaradas se elevan a la categoría de iconos en sus imponentes óleos.

Estos nuevos objetos cotidianos, menospreciados por su superficialidad, son también los de nuestra sociedad consumista. En esta obra inquietantemente realista, Olivier Lépront logra detectar la belleza en medio de la utilidad y la futilidadtransformando las vanidades contemporáneas en odas a la contemplación.

Para la edición Private Choice 2024, un nuevo medio debuta en la obra de Olivier Lépront: la tinta china. Dando un carácter monocromático a sus obras, las transforma en trampantojos, con apariencia de fotografías en blanco y negro. Este uso de las aguadas de tinta no sólo confiere a su obra un aire vintage, sino que también desvirtúa el aspecto psicodélico que suele asociarse a los neumáticos encontrados en la orilla del mar. El artista capta escenas banales de la vida, que congela en un entorno indefinido. Aquí, el artista ha tomado como modelo a los vendedores de juguetes de playa que se ven en Cefallu, en el sur de Italia.

Olivier Lépront también trabaja sobre soportes de madera, dejando ver el abrigo o el albornoz de su abuelo. Presenta una iconografía de la ausencia y la nostalgia La prenda yace descuidada en el suelo, conservando la huella de la persona que un día la vistió. Sólo el aspecto del suelo, dañado por el paso del tiempo, nos da pistas sobre la ubicación de la escena y su temporalidad. Son fragmentos del castillo familiar en las afueras de Burdeos.

El artista añade elementos simbólicos: gendarmes que recuerdan su infancia, insectos con motivos que recuerdan las máscaras africanas... Estos detalles encarnan el concepto del "memento moricreando escenas íntimas y conmovedoras. Su obra recuerda a una versión personal de Habitación de Arles de Van Goghcon su emblemática silla vacía.